Fotografía: Dennis Castro
La historia de los coches de madera nace en el tradicional barrio de San Roque, manteniendo viva una historia de amistad y hermandad. Iniciativa de Jorge Aguilar y su grupo de amigos quienes ya desde 1941 comenzaron a realizar competencias con los famosos y tradicionales coches de madera, aprovechando el poco tráfico que había en Quito.
Las competencias de los coches de madera ya llevan 41 años de forma organizada. Un 4 de diciembre de 1973 se llevó a cabo la primera competencia en la avenida Colón siendo un homenaje a los niños que se encontraban hospitalizados en el hospital Eugenio Espejo.
“La tradición no se mercantiliza porque de lo contrario no es tradición” Marco Aguilar
Los hermanos Aguilar Veintimilla son los mentores de esta competencia tradicional que ya parte de la cultura quiteña. Las inscripciones no tienen ningún valor económico, aún así se les da a los competidores camisetas y los premios a aquellos que saben demostrar sus dotes en la pista. Para Marco Aguilar el gran premio o ganancia que puede tener es el de reunir a la gente de la comunidad y el disfrute de las mismas. Pensando en lo corredores o cochedores como don Marco los nombra, son los que más sufren, los que permanecen nerviosos y hasta no duermen la noche anterior pensando en el mañana.
Una niña de 13 años de edad, de los cuales 8 años ha estado en las pistas, se ha aventurado a la competencia, a sentir la adrenalina que provoca al mismo tiempo, esa sensación de inseguridad y de ganas y sed de triunfo es lo que caracteriza a Yadira. Tiene pendiente el primer lugar, es lo que aún no ha podido obtener a pesar de haber estado en el podio repetitivas ocasiones, el oro se le ha escapado de las manos. Motivada por seguir la tradición familiar en la cual tíos, primos alguna vez fueron parte de esta emocionante competencia
Adela María Chata
«La tradición la vengo a ver desde que yo tengo uso y razón» fueron las palabras que manifestó doña Adela, «nunca algún familiar mío ha competido pero me parece algo muy bueno que hace sentir a gusto»; espera que no se pierda la tradición, es más hay que recuperar y no olvidar, manifiesta.
Dennis Castro. Periodo 47. Grupo 721