El rostro humano de un policía, es el lado que nadie conoce de éste servidor público, «es complemento indispensable de cualquier persona, así como para ser un buen hijo o hermano», expresó el policía, Stalyn De la Cruz. Estar fuera de casa, en el cumplimiento de su deber es de apoyar a la gente no solamente desde el punto de vista de un policía, “Lo que tratamos es de que la sociedad vea en nosotros no solo a un policía, si no a un hermano, al hijo o al padre para ayudarlos y a su vez vemos en ellos a nuestras propias familias, a las cuales tenemos que proteger”.
Señaló que son pocos los momentos que puede disfrutar con su madre y hermana que son las personas más importantes en su vida, “por cuestiones de mi trabajo no he podido compartir con ellas las experiencias diarias, sus logros y alegrías”. Indicó que gracias a la tecnología puede tener un tiempo por las noches para poder verlas y hablar con ellas y así estar pendiente de que no les falte nada, ya que él se hizo cargo de su familia desde temprana edad, debido a que su padre los abandonó. “aunque mi madre comprenda mi trabajo, nunca faltan esas palabras que me quiebran, eso entristece a cualquier hijo, no poder compartir esos momentos con su madre”.
El policía siempre, está expuesto a riesgos y en todo momento listo para afrontar cualquier situación. “con miedo, como todos mis compañeros, salimos de nuestras casas, pero nunca sabemos si vamos a regresar a salvo; sin embargo es parte de nuestro trabajo”, aseguró. Stalyn está comprometido con la ciudadanía y se siente satisfecho con su labor, la cual ha venido desarrollando por más de cuatro años, “me he perdido muchos momentos con mi mama y mi hermana, pero sé que estoy haciendo lo correcto, todo este sacrificio es por ellas para que nunca les falta nada y para que se sientan orgullosas de tener un hombre en la casa que nunca las abandonará”.
Para Stalyn De La Cuz ser un policía, es siempre estar sujeto a las críticas de los ciudadanos, «por ejemplo los hijos de mis compañeros son señalados en la escuela por sus propios maestros que alguna vez fueron reprendidos por un policía», cuando un policía actúa o cumple su deber es criticado y cuando no, también, «los ciudadanos quieren que actuemos únicamente a favor y nunca en contra son pocos los que nos entienden y comprenden que nuestro trabajo es cumplir con las leyes y normas a las cuales nos regimos», manifiesta.
Stalyn De La Cruz cree que ser policía es una profesión que afecta en la sociedad, por eso es necesario que la conducta de un policía tenga objetividad. La labor policial tiene más responsabilidad ética y moral que la de cualquier ciudadano «ser un buen policía rebasa lo personal, por lo que algunas veces no existe espacio para la vida familiar».